Reign 2x11: 'Getaway'


Mientras la lucha entre protestantes y católicos continúa, y todos los protestantes que fueron colgados de repente llevan la marca de los jinetes oscuros. Bash cree que los cuerpos han sido marcados después de morir. Para proteger a Lord Condé (quien también ha sido marcado), decide marcar a un católico. Así que decide marcar al amante del cardenal, para asegurarse de que el plan funcionará. 

Bash tiene la mala suerte de que sale herido de marcar al clérigo con el que se acuesta el cardenal, y el cardenal descubre que Bash ha sido quien lo ha marcado. El cardenal cree que Bash ha actuado sin el consentimiento de Francis, pero se sorprende al descubrir lo contrario. Francis le dice que si no deja de ir tras Lord Condé, su amante morirá, estando completamente seguro de que el cardenal está enamorado del clérigo.  

Lord Condé y Mary parece que se están distanciando, a pesar de que Mary hace todo lo posible por salvarlo en este capítulo. Sus sentimientos hacia ella quedaron claros después de que Mary leyera su carta, pero ella no parece sentir lo mismo (o al menos eso aparenta).  Mary pretende alejarse del castillo durante un tiempo, para distanciarse de Francis, aunque es consciente de que él también está sufriendo por todo lo ocurrido. Sin embargo, Mary no se siente fuerte para seguir adelante. 

Mary: “I don’t feel strong. I feel like I’m sleep walking, and I don’t know how to wake up.”

Por otra parte, Kenna sospecha que Catherine está envenenado a Claude, ya que no sería la primera vez que hace algo así. Bash no se la cree, ya que considera que Catherine siempre ha sido muy protectora con sus hijos. Sin embargo, le dice a Kenna que busque pruebas para demostrar que Catherine está envenenando a su hija. A diferencia de Francis, Bash es un marido que apoya a su mujer desde el principio. 

El hermano de Condé, el rey Antoine, organiza toda una fiesta en la que junta a dos personas (estén casadas o no) para que se líen y pasen la noche juntas. Antoine le pide a Condé que se acerque a Mary, para que ella se enamore de él. Así que para proteger a Mary, Condé miente y dice que no le gusta, y que ella tampoco está interesada en él. 


Mary le cuenta a Greer que teme pasarse toda la vida evitando el contacto con un  hombre. Al volver a marcar a Condé para tapar la marca de los jinetes, Mary le coge de la mano para conectar con él y hacer que se sienta mejor. Así que poco a poco parece que se va curando. 

Greer, por su parte, ha compartido momentos de tensión con Leith, a quien tiene que ver constantemente en el castillo ahora que está lejos de su marido. ¿Volverá a ocurrir algo entre ellos? 

Claude se enfrenta a su madre y trata de suicidarse, si eso es lo que su madre quiere. Está a punto de beberse una copa llena de veneno, cuando su madre reacciona y se da cuenta de que Claude no sabía lo que hacía cuando mató a sus hermanas. Así vemos cómo los fantasmas de Henry y sus otras dos hijas desaparecen (¿para siempre?). 

Al final Mary se anima a darle una segunda oportunidad a su matrimonio, pero se encuentra a Francis y Lola durmiendo en la misma cama con su bebé. La relación de Francis con Lola no ha hecho más que traer problemas a su matrimonio con Mary.


Además, la semana que viene Francis descubrirá que Lord Condé está enamorado de Mary, y parece que la noticia no le va a sentar demasiado bien... 


Aquí está la promo del siguiente episodio:


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